Siempre me ha atraído el vacío. Tanto la sensación de flotar en él, como las infinitas posibilidades que alborotan mi cabeza con ideas de cómo llenarlo.
Pero este que me ocupa es distinto.Porque es uno que antes estuvo lleno.
De tantas emociones que necesitaría un par de vidas para poder explicarlas. Buenas, malas y peores ... de todo un mucho.
Así que aquí me veo, escudriñando por dónde darle aliento a este suspiro ahogado que nace de este vacío sin fín.
Igual no es cuestión de llenarlo con nada ... igual sólo es cuestión de dejarlo estar ...
Lo positivo del vacío es que puedes llenarlo de lo que te de la gana.
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