Todavía no sale el sol y mi mente ya está despierta, comenzando la maratón de cada día.
Millones de kilómetros, viajando a la velocidad de la luz.
Respuestas sin preguntas, colgando como frutas en el árbol de la vida.
Preguntas flotando en el aire, intentando encontrar la verdadera respuesta.
Charcos con restos de corazón, que salpican cuando paso y los piso.
Pequeñas luminarias que a duras penas lanzan luz en una rotonda mental, de la que seguro saldré mareada ( si es que doy con la salida).
No me encuentro, pero tampoco estoy perdida.
Cada día un camino nuevo.
Nuevas ventanas que muestran paisajes sin estrenar, y otras con escenas carcomidas y obsoletas, que es necesario cerrar.
Ahora empieza mi viaje, terminará cuando anochezca.
Y si he conducido bien, para esas horas en las que el sol se esconde, algo nuevo habré aprendido.
Malo sea...
Buen viaje a todes.
Millones de kilómetros, viajando a la velocidad de la luz.
Respuestas sin preguntas, colgando como frutas en el árbol de la vida.
Preguntas flotando en el aire, intentando encontrar la verdadera respuesta.
Charcos con restos de corazón, que salpican cuando paso y los piso.
Pequeñas luminarias que a duras penas lanzan luz en una rotonda mental, de la que seguro saldré mareada ( si es que doy con la salida).
No me encuentro, pero tampoco estoy perdida.
Cada día un camino nuevo.
Nuevas ventanas que muestran paisajes sin estrenar, y otras con escenas carcomidas y obsoletas, que es necesario cerrar.
Ahora empieza mi viaje, terminará cuando anochezca.
Y si he conducido bien, para esas horas en las que el sol se esconde, algo nuevo habré aprendido.
Malo sea...
Buen viaje a todes.
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