A veces siento como si me traspasaran rayos en todas direcciones. Y veo flotando mi cuerpo desintegrado.
Y en cada trocico, una amiga, un amigo, un atardecer en el monte, el sonido del agua del rio o un canto de pájaros que escuché una vez.
Siempre que me pasa, intento volver a reunirlos y ponerlos todos en orden.
Pero ya me falla la memoria...
Así que he decidido que ese atardecer sea parte de mi memoria futura, igual que todos los buenos momentos de los que disfruté alguna vez no tan lejana.
Quizás cambien los personajes, los parajes o el tipo de canto de las aves... pero creo que, en esencia, lo más importante es eso: conservar la esencia ( como su propio nombre indica).
Y en este caso se llama disfrutar.
De la aventura, ... de esa ventura que a veces se torna desventura, con la misma rapidez que llevan los rayos al traspasarme , o viceversa.
Llueve y es de noche.
Esperaré a mañana para reintegrarme, no sea que... Y luego...
Este blog es el principio de algo que empieza como continuación de una inquietud que tengo desde cría... Básicamente lo utilizo como terapia ocupacional, para no dejar que a mis neuronas les de por flotar a favor de la corriente y se me escapen definitivamente... Humor con amor o viceversa. No se me ocurre combinación mejor para retenerlas.
miércoles, 7 de diciembre de 2016
RAYOS SIN TRUENOS
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