SOLILOQIOS DE UNA BEASTRUZ PERDIDA EN TERRANOVA

jueves, 14 de septiembre de 2017

QUIEN BIEN TE QUIERE TE HARÁ GOZAR Y REÍR Y CANTAR ( PERO DE CONTÍNUO)

Tengo la... los... el ... un  lío en el intelecto con esto del amor.
Bueno, y en el resto del cuerpo. Para qué engañarnos. Mido metro ochenta. Puedo literalmente también hacerme un lío físico tremendo si quiero.
Para mí que el auténtico  amor verdadero debiera ser algo grande y ligero que fluye y a medida que lo hace, todo ser viviente al que toque de cerca su onda expansiva de una u otra forma crece,  mejora en general y se activa en su belleza interior.
Esa que se ve incluso a través de lorzas, chepa o arrugas.
 Incluso puede llegar a irradiarse a través de la piel.
Y digo de una u otra forma porque es ahí donde me viene el lío:
Está el amor " familiar".
Este es un amor impuesto desde el nacimiento. No lo escogemos. Nos toca y punto. Luego cada cual elige o no cómo lo vive o lo soluciona. 
Pero es importante porque es como la tarea que viene impuesta desde el más allá de algún sitio inconcreto fuera de la tierra.
Manda " güevos" la cosa...
Luego está el amor de la amistad, que por estadística es de los más duraderos. ( Dicen que porque es amor sin sexo).
También los amores pantalla y desesperados. El interesado. El estético. El platónico, plutónico y nostálgico.
El amor enfermizo y el absorbente.
El loco inquietante y el equilibrado pero aburrido.
El de verano...
Hablamos del amor como si fuese algo que aparece o desaparece según su propio albedrío.
Como si tuviera vida propia.
Como si lo hubiera de diferentes razas y colores.
Como si no hubiera que cuidarlo y alimentarlo para que no se quede raquítico y crezca grande y sano.
Como si fuese algo ajeno.
 Y como es la gasolina de la vida, vagamos tras sus pasos intentando recoger algo del calor que desprende igual que el recién nacido busca el del latido del corazón que suena bajo el pecho de su madre.
Hablamos del amor, como si supiéramos. Incluso hay personas atrevidas entre las que me incluyo que osan incluso escribir sobre él y  desgraciadamente a menudo  sobre los devastadores efectos secundarios que pueden provocar tanto su presencia como su ausencia.
Y si realmente es amor creo que no debería doler, igual que no debiera haber amores que maten.
El único efecto secundario del amor sólo puede ser el aumento de la alegría y las ganas de crecer.
Y por eso creo que estamos jodidas.
Parece que estemos condenados a encontrar a alguien concreto que nos lo proporcione para siempre.
Como si hubiera surtidores de amor incombustible a cada paso.
A lo sumo somos surtidores sólo en la parte fluida de uno de los resultados del amor.
Y es aquí donde entra nuestra educación machista ancestral, las leyes químicas, las biológicas, y la ley de compatibilidades. También la de probabilidades.
Así como la  del péndulo y la de la gravedad y las que desafían a ésta en momentos puntuales a menudo fugaces...
Y con toda esta ensalada de legislatura al dente, es difícil que a la larga la combinación resulte satisfactoria.
Las largas somos así.
Demasiadas premisas que cumplir que no controlamos para hacer realidad un sólo sentimiento que envuelva a todos lo demás.
Mi intuición me dice que cuando das amor esperando que te correspondan en realidad lo que quieres no es dar, sino hacer un trueque o a lo peor sólo cubrir una necesidad.
En ese caso se produce una adicción por parte de una o ambas personas que como toda adicción raramente llega a buen puerto.
Luego si la otra parte en cuestión no aporta lo que una considera que debe ser un intercambio justo, el amor desaparece igual que apareció: como por arte de magia.
Eran sólo putas mariposas estomacales de duración definida.
Y cómo joribia darse cuenta, oigan...
(En estos casos me aconsejo analizar, comprender, aprender, crecer y no andar hacia atrás ni para coger impulso.
 El tiempo no lo cura todo, pero al final siempre tiende a amainar lo que se le ponga por delante.)
Mi intuición me sugiere que no se puede basar el amor sólo en el placer físico porque... Seamos sinceros. ¿ Cuánto tiempo de nuestra vida empleamos en el contacto físico?...¿con otros seres humanos diferentes a nosotros mismos? ¿Cuánto tiempo estamos física y mentalmente operativos? (Me refiero a las dos cosas a la vez. El corazón ni lo nombro.)
... Siempre he pensado que pretender encontrar una persona que cubra todas nuestras carencias es algo injusto para las dos partes. 
Y también que si desde niños incluyéramos las caricias, los masajes, los abrazos  y todas las artes en parte de las rutinas diarias con los que nos rodean y no los relegáramos a la vida íntima y sexual de cada uno, no sería necesario que una sola persona cubriera todas nuestras necesidades en este y otros aspectos.
Hacerse responsable de la felicidad de otro ser ( con tendencia a la humanidad) es una carga muy difícil de soportar y más difícil todavía satisfacer plenamente.
Entre otras cosas porque somos los seres vivos más desagradecidos e irrespetuosos con la única ley que lo rige todo y la que verdaderamente nos debiera importar que es la ley natural.
Y para mí que el amor natural no debería ser ninguna carga, sino todo lo contrario.
Por esto y por otras cosas que vienen al caso pero que paso de escribir porque tengo el estómago vacío, llego a la conclusión de que el único amor que vale y que dura indefinidamente es el incondicional.
Por varias cuestiones claras: 
Se puede practicar en la cercanía o en la distancia. 
En la cocina, en la calle, en el mercado o en una estación. Debajo de un árbol.
En soledad, en pareja o en grupo, con hombres mujeres niños ancianos y cualquier ser vivo sin que te miren raro.
Bueno sí, te siguen mirando raro pero al menos desconectan el modo soslayo y las ganas de cotillear desaparecen. 
El amor incondicional no está de moda.
Luego, como no pides nada a cambio, nunca pierdes la libertad de darlo o quitarlo o ponerlo aquí o allá según requiera la exigencia puntual del desafío de momento que nos proponga la vida.
No hay que aguardar  recompensa y se ahorra una bastante tiempo de cabreos innecesarios y dolores de corazón.
A veces, casi siempre, es jodido al principio practicarlo.
Al menos hasta que te acostumbras a no esperar nada.
Pero una vez superada esa fase, una se da cuenta de que la felicidad igual que el amor, pueden fabricarse en nuestro interior sin necesidad de hacer a nadie ajeno responsable, sino acaso colaborador en el trabajo de mejora personal.
Y que el hecho de la incondicionalidad proporciona una felicidad y una durabilidad incomparable e inolvidable como el acero.
Porque no supone penas, ni pesos, ni condenas.
Porque es la única forma de hacer el amor por verdadero amor al arte ... de inventarse el amor cada día.
Y mi intuición me dice que por aquí voy bien.

¿Hay alguien ahí í   í    í 
       í        í         í    ?
... ... ... ... ... ... ... ... ... ...
... ... ... ... ... ... ... ... ... ...

Vale. Bueno. Notejode...
Alguna vez me acostumbraré.
Voy a comer algo.






No hay comentarios:

Publicar un comentario